El saber determinar correctamente los costos fijos y variables de una empresa en esencial para determinar el “punto de equilibrio”, es decir, la cantidad de venas necesarias para lograr, al menos, que el negocio no pierda dinero.

Para determinar el punto de equilibrio, debemos asumir que conocemos con claridad al menos tres datos financieros de la empresa:  Las ventas efectuadas en un período, los costos fijos y los costos variables de este mismo período.   Una vez calculados los tres indicadores, se debe efectuar el siguiente procedimiento de dos pasos:

Primero: determinar el “Margen Bruto” de acuerdo con la siguiente fórmula:

Margen Bruto = (Ventas – Costos Variables) / Ventas.

 

Segundo: Calcular el punto de equilibrio con la fórmula siguiente:

Punto de equilibrio = Costos Fijos / Margen Bruto.

 

Una vez determinado el punto de equilibrio, Determinar la rentabilidad de la empresa de esta manera:

1) Si las ventas del período son menores a punto de equilibrio, las pérdidas financieras del negocio se calculan así:

Pérdidas del período = Ventas – Costos Variables – Costos Fijos

El número, por supuesto negativo, refleja el déficit financiero de la organización.

2) Si las ventas del período son iguales al punto de equilibrio, la empresa no tiene utilidades, pero tampoco pérdidas.

3) Si las ventas del período son mayores al punto de equilibrio, la utilidad puede ser calculada mediante esta fórmula:

Utilidad del período = (Ventas – Costos Fijos) x Margen Bruto